"En el día de San Jamás
el planeta un Edén será"
Bertolt Brech - Tata Cedron
Amanuenses del macaneo
impíos sucios falsos truchos
arrastrados
delirantes concentrados
fabuladores constituidos
de tiempos y espacios asumidos
vaya saber por quién, por qué y sobre todo
sobre todo, entiéndase bien
para qué
¿Te acordás, argentino, de tu primera humillación?
Esos caramelos duros como piedras, insulsos, el sticker no pegaba, se mojaba y se rompía.
El alfajor más berreta del mundo, sin gracia y arenoso, triste y lastimoso.
Las dos capitas y en el medio otra capita, firme, ¿no era que el dulce se derretía? Una suela.
La inflación
es una pasión
Y
se sabé
lo cantan todas las hinchadas
la pasiones son inexplicables
Por eso
cada tanto
hay que dejarse llevar por la intuición
Así lo hicieron los maquinistas de La Fraternidad, allá, a finales del siglo 19 cuando fueron a la huelga
claro
querían cobrar en oro. Un metal se sostiene más que mil papelitos volando, eso es evidente
Es evidente también que perdieron
A lo largo del siglo 20 nunca alcanzó
siempre faltan
cómo todos también saben
cinco pa`l peso.
La abuela apiló, juntó, guardó
enlatados
hizo dulces, inventó la conserva
le puso agua, a veces, mucha agua al tuco
cocinó a fuego lento a lo Salgán
con la furia de ese piano
saltó de corcho en corcho
de baldosa en baldosa
cargando la garrafa que subía y subía.
Abuela. El que guarda siempre tiene
y si no
camine camine
y si no
a llorar a la iglesia, ahí, algo siempre tienen.
Lo dejo a tu criterio.
Misterio
mucho misterio en el freezer,
en los restos, recalentados
hasta que la coloratura granate
ganaba la partida
Y mamá
cose y cose
emparcha y emparcha
remienda y remienda
se convence y se convence
La ropa dos talles más grande
la mayonesa, también, la más grande, eso sí, hay que terminarla rápido antes que se pudra
Manteca, la barata, total es manteca. Dos colores se inventaron: el azul de Klein y el de la manteca barata.
Facturas sucumbiendo, empequeñeciendo
se confunden con las ex masas finas
agrios sánguches de miga
decoran la impaciencia de las pálidas vitrinas
Ésta
la época de los poetas menores
sin mentores
sin tradición; por ende: sin vanguardia
Mientras buscan corazones
Mejor
contemplo al carnicero inventando palabras
descargado, espinazo, osobuco
chau chau adiós!
jugoso vacío, tierna costilla
nos vemos en la próxima carambola de commodities
astilla astilla
raro siempre todo raro.
Ponemos un kiosko en la pieza de la nena, una pizzería en el garage.
Dejá, lo arreglo yo a eso. Me doy maña.
Mentira. Todo roto, a media máquina.
Lo atamos con alambre
Je!
Invento de resignados ese
vapuleados, escupidos, terminados.
Los ricos no atan con alambre. No siguen.
Paran y compran.
Otra vez
la intuición
Algo deben tener que ver estos tipos
con esta pasión
que es la inflación
tienen un repertorio de alcahuetes a destajo
aparecen, desfilan, aclaran
"esto te lo resuelvo con los ojos cerrados"
Cerrado lo que se dice cerrado
terminó el negocio que te puso papá
con lo que se ahorró de aquellos cumpleaños:
la coca que no era coca, esos chizitos de cal, la torta dios mío, la torta de la tía.
Tía, vos no sabías cocinar.
Y los palitos, todo un asunto los palitos, se prendían fuego.
Un comestible no puede agarrar fuego: no debería, ¿no? Digamos
Preparando igual toda la estructura para la época de la canchereada.
Vino, bien barato el vino
bien cojudos, éramos
Más solo que Kung fu
degustando ese inclasificable choripan
Eso no es nada con la aparición del cálculo en tu vida. Si aumenta el precio aumenta el cálculo
¿me conviene prestar, compartir?
¿Realmente me conviene?
Ahí ya estás perdido.
Entraste como un caballo.
No pasa nada.
Durante el año de mi generación
remarcaban y remarcaban
un plan primavera para el lugar más austral del mundo.
De fondo, sonaba “El ritual de la banana”: en ese marco, a quien culpar.
No importa.
Piti Piti del Billy cafaro, barba candado, onganiato
¡Krieger Vasena, el que te vacío la alacena!
¡Uf que poeta! ¡Se me pianta un lagrimon!
Recordando a Palito, él si que te cantaba la posta,
¿Se acuerdan?
"Tírate al río en la parte más profunda y después cuando te hundas si querés podés gritar"
Y así fue
Por suerte después los pibes la siguieron
"Vamos la renga con huevo vaya al frente que se lo pide toda la gente"
Esos fueron los dorados años 90:
nada sirvió tampoco.
Todo subió tanto que explotó, reventó, implotó y aquella gente del río fue retornado
pero
por partes.
Un cráneo por ahí, un fémur por allá.
A las costas.
¡Donde nos vamos de vacaciones!
Ah ¡la paleta sanguchera!
¡El fiambrin!, ¡Mocoreta!
Y ofertas. Siempre buscando ofertas. Ni en vacaciones uno deja de buscar ofertas.
Y el telo ese que fuimos la otra vez
Y el pantalón que te regale
¡Qué feos eran!
El amor no eh, ojo, el amor es lindo, lo juro
Sucede que
su representación material está
atada
a esta extraña pasión
la inflación.
Autor: Nahuel Lema
nahuellema95@gmail.com
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